miércoles, 5 de mayo de 2010

Minificciones ilustradas

Breves minificiones inspiradas por imágenes tomadas aleatoriamente:

Su coartada fue desechada de inmediato, él era el único de nosotros que ponía huevos azules.


—Aquí es— dijo en un tono de asco y condenación —aquí es donde todas se convierten en mariposas—


Estábamos tan sorprendidos que decidimos dejar a los bloques mágicos crecer cuanto quisieran.


Él estaba tan feliz de haber encontrado a esa persona que lo satisficiera en todo, incluso en sus alocadas ocurrencias sexuales; desafortunadamente fue tanta su emoción y felicidad, que olvido quitarse la peluca rubia y despintarse los labios.


La casa había sido sellada y bardeada para evitar que alguien pudiera entrar jamás, la advertencia era clara, el demonio azul estaba triste por su confinada soledad.

2 comentarios:

Karabá dijo...

Ja! huevos azules... ¿los ponía el demonio azul?
[osease, chido vato]

Ana Marinera dijo...

Ja, me encantó el último.